Esta leyenda
urbana es muy común entre la cultura popular gallega y asturiana en la cual un
enorme perro sea blanco o negro, en la noche emerge del mar sacudiéndose la sal
y el salitre, arrastrando cadenas de hierro e incluso podría poseer grandes
orejas o cuernos, siempre portando malos augurios.
Una vez que el
Urco o el Huerco como lo conocen en Asturias está listo, ira por caminos y
veredas, ladrando rabiosamente de una forma gutural, despertando temor en
quienes lo escuchan y atrayendo así las criaturas de la noche en especial a los
perros. Formando una jauría que avanza a un ritmo ruidoso. Los caninos están
sometidos a él y el Urco lo sabe, pasea a su antojo sin importarle los muros o
cercos pues los salta sin problema siempre mirando en la oscuridad con
brillantes ojos.
Se han escrito
muchas cosas sobre el Urco y no todas describen a la misma criatura pero en
general nos hacen entender que este ser existe, que esta consiente de todo en
todas partes y que existe desde siempre. Siempre se dirigirá a un lugar
determinado ya que el mal augurio va a caer en ese lugar o persona, las
desgracias, la muerte, enfermedades repentinas y extrañas; son elementos que el
Urco sigue y cuando llegue al lugar, la criatura rodeada de perros ruidosos se
detendrá y solo observara.
Como ya hemos
dicho no todos los testigos han descrito a la misma criatura, pues en muchos
años han ido apareciendo personas que describen extraños buitres que entran en
los corrales pero que hacen sonidos diferentes a un buitre o incluso imitan el
sonido de otros animales como los gatos u ovejas.
También hay
quienes lo avistaron saliendo del mismo mar y tomando la forma o cruce de dos
animales como mitad lobo y mitad pez, pescadores que sintieron el golpe del
Urco mientras aprovechaban la noche para hacer esta actividad suponiendo que el
Urco se dirigía a la playa para hacer uno de sus tristes recorridos.
Muchas historias
se han contado pero siempre por norma general así como por mayoría de testigos,
al Urco se lo asocia más con la forma de un perro enorme, pues hay relatos de
testigos que ha puertas de su muerte o enfermedad, mencionaban estar viendo un
enorme perro rodeado de otros que le estaba mirando fijamente en la noche a través
de la ventana, pero por más que enfocaran la mirada nadie más parecía verlo, era
descrito por algunos con fauces abiertas donde su aliento exhalaba fuego o
vapor ardiente y daban gritos donde ¡Urco, el perro del infierno¡ se mencionaba
en la casa asustando a todos para poco después comprobar que una tragedia había
sucedido.
La imagen que se
muestra fue encontrada en la red, tiene sus propios autores y/o dueños y solo
se ha colocado como información y guía del tema que estamos tratando.
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